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Administración y custodia de los sellos

En los albores que siguieron a la Caída de Lilium, la necesidad de proteger las legendarias lanzas —artefactos de poder inimaginable— se volvió un deber sagrado y eterno para Lithernia. La administración y custodia de los sellos que aprisionan la esencia de estas armas fue confiada a órdenes ancestrales, cuya existencia se entrelaza con la misma historia y destino del mundo.

Orígenes de los Sellos y su Custodia

Tras la disolución del reino de Lilium, sus Heroes y magos más poderosos forjaron rituales para asegurar que las lanzas no pudieran ser utilizadas jamás para resucitar la catástrofe que asoló el mundo. Estos rituales dieron origen a los Sellos: barreras místicas impenetrables, ancladas por los guardianes que guardaban el equilibrio entre el poder y la perdición.

Los Guardianes de los Sellos

La Orden de los Custodiantes de la Llama Eterna

Formada por paladines consagrados, esta orden se dedica a la vigilia constante de los Sellos. Sus miembros son entrenados desde la infancia en el arte de la Espiritualidad Marcial, capaces de canalizar la llama eterna —un fuego sagrado que purifica y protege los receptáculos místicos.

Los Vigías del Azur Profundo

Una orden de sabios y hechiceros que se encargan del mantenimiento arcano y renovación periódica de los Sellos. Sus estudios combinan la magia ancestral de Lilium con conocimientos actuales de la materia y energía del mundo.

El Ritual de Renuevo

Cada año, durante la Noche de los Ecos Silenciosos —un tiempo donde la frontera entre el plano mortal y el espiritual se hace permeable—, los guardianes realizan el ritual de renuevo. Esta ceremonia sagrada sostiene la fuerza vital de los Sellos y evita que su poder se debilite.

Leyendas y Tradiciones

Se dice que quien intente violar los Sellos sufrirá la condena de las Sombras Eternas, una maldición que desgarra el alma en un ciclo interminable de dolor y negación. Los relatos más antiguos cuentan también que, en tiempos de gran necesidad, los Sellos pueden responder a la llamada de un elegido, pero solo si este personifica la verdadera esperanza y la pureza de corazón.

Además, las comunidades cercanas a los templos custodios realizan festivales en honor a los guardianes, con cantos que evocan la memoria de Lilium y la eterna vigilancia para que la oscuridad jamás resurja.


La administración y custodia de los Sellos se concibe, en definitiva, no solo como una tarea política o militar, sino como un sagrado pacto entre generaciones, un manifiesto vivo del compromiso para preservar la estabilidad de Lithernia frente a los vestigios de su más aciago pasado.

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